La CISAC presenta su Estudio histórico « Tiempos de cultura » en el Simposio de investigación de Berlín 2016 sobre industrias culturales y creativas

El 23 de septiembre, el Director General de la CISAC, Gadi Oron presentó los resultados del estudio elaborado por EY “Tiempos de cultura – El primer mapa mundial sobre las industrias culturales y creativas” en el Simposio de investigación de Berlín 2016 sobre cultura e industrias creativas (ICC) por invitación del Gobierno alemán y la sociedad miembro de la CISAC, GEMA. Organizado por el Centro de Excelencia del Gobierno Federal para las Industrias Culturales y Creativas como parte de la iniciativa para las Industrias Culturales y Creativas en el Ministerio Federal de Economía y Energía, el simposio congregó a expertos y profesionales de las industrias creativas, los medios de comunicación y el sector económico y científico. 

El día se organizó en dos secciones; conceptos teóricos e informes durante la mañana  y su efecto sobre las industrias culturales por la tarde. Durante las observaciones iniciales, el experto en investigación cultural Michael Söndermann, declaró que “los gobiernos necesitan datos científicos a la hora de tomar decisiones”. Éste señaló que las ICC son sectores infravalorados con una importancia que requiere una mayor visibilidad y un componente internacional más sólido. Más concretamente, éste señaló: “Debemos establecer un vínculo entre las industrias creativas y los sectores consolidados”. Seguidamente, el Director Ministerial de la Comisionada del Gobierno Federal Alemán para la Cultura y los Medios de Comunicación, Günter Winands opinó que la protección era lo más importante, especialmente teniendo en cuenta los retos que plantea la tecnología, indicando que “lo que podemos hacer es proponer el marco adecuado para asegurarnos de que  [la creación] es posible y de que los creadores reciben una remuneración justa.”

Cuando Söndermann presentó el orden del día, destacó la importancia del estudio de la CISAC, que está basado en hechos,  “para dar impulso a nivel internacional”. La confederación internacional “muestra que los países desarrollados y los países en desarrollo hacen frente a los mismos retos”.

Ofreciendo una perspectiva general, Gadi Oron presentó a los asistentes la realidad económica calculada a escala mundial en el estudio Tiempos de cultura.   Este estudio de 120 páginas,  que se dio a conocer en diciembre de 2015 durante una conferencia de prensa organizada en la UNESCO, determina los datos que explican el alcance y el valor de las industrias creativas mundiales. Los resultados muestran a los responsables políticos la importancia de las industrias impulsadas por los derechos de autor y la necesidad de disponer de unas leyes estrictas para proteger la creación.  Gadi Oron señaló que en las difíciles condiciones actuales del mercado “gran parte del valor es absorbido por los intermediarios, pero éste no es compartido. En ese contexto, es importante mostrar la importancia económica del sector creativo, para promover unas políticas favorables”. 

Estableciendo el vínculo con respecto a los beneficios económicos de las ICC, Gadi Oron subrayó que  “para proteger a los creadores también debe estimularse la economía”, además de llamar la atención sobre la cuestión de la transferencia de valor en el mercado digital y sus efectos negativos.  Éste declaró: “nos enfrentamos a fuerzas poderosas que intentan constantemente reducir la protección del derecho de autor para servir mejor a sus intereses...Somos testigos de un ataque sistémico y coordinado contra el copyright y los derechos de los creadores, que se presentan como un ‘freno a la innovación’ cuando en realidad, la creación es innovación”.  

Oron señaló que este estudio no tiene precedentes en cuanto a su alcance, cobertura, integración de “enormes cantidades de datos, con historias personales” y a su intento de hacer una estimación por primera vez del impacto de las ICC en la economía mundial.   “Los resultados de esta investigación fueron sorprendentes, ya que las ICC dan trabajo a aproximadamente 30 millones de personas  y generan unos ingresos de 2.215 millones de euros. Este estudio también refleja la relación directa entre la protección del derecho de autor, las ICC y el desarrollo económico, además de la necesidad de establecer unos marcos jurídicos para protegerlos y apoyarlos. Con ello, se crearía un entorno en el que los inversores sabrían que pueden invertir en cultura y rentabilizar su inversión”.    

Para comenzar la mesa redonda sobre las implicaciones del estudio en Alemania, Cornelia Dümcke de Culture Concepts reforzó la presentación: “Tenemos que establecer un marco para preservar la diversidad cultural. Tenemos que solventar cualquier desigualdad en los mercados para establecer la igualdad de condiciones”. El diálogo en Alemania pasó por alto el valor de las ICC, y sin embargo esta tendencia se invirtió con un nuevo enfoque económico sobre estas industrias en los últimos años.  Andreas Johannes Wiesand de Cultural Compendium insistió en la protección de los creadores, declarando: “Existe una situación desigual para los empleados de estas diversas áreas de las industrias culturales. Lo que podemos deducir de esto es que el porcentaje de empleados en una situación laboral precaria es mucho mayor en relación al resto de la sociedad.   Esto debería ser motivo para que nos esforcemos más y tratemos de encontrar soluciones al respecto”. Por último, el compositor Matthias Hornschuh mencionó la alteración en el mercado confirmando que “Se crea valor, pero no se recupera. Tenemos que actuar urgentemente y crear un marco regulador… Debemos desarrollar instrumentos jurídicos que transciendan las fronteras”.

La presentación y la mesa redonda concluyeron con una Sesión de preguntas y respuestas. Durante la sesión, varios comentarios suscitaron la sorpresa de conocer que Asia-Pacífico se consideraba mayor que Europa en tamaño.  En estos últimos años, China ha cambiado su enfoque con respecto a la protección del derecho de autor después de darse cuenta de que el país tenía un interés local. Matthias Hornschuh respaldó el llamamiento de China a reforzar y proteger la creación producida a nivel nacional. Andreas Johannes Wiesand confirmó esta idea señalando que este proceso de “replanteamiento” había tenido lugar en Estados Unidos anteriormente.

Gadi Oron finalizó con una reflexión clave para los asistentes en Berlín, “Ya ven lo que un gobierno legislativo favorable puede hacer por la economía de las industrias culturales. Cuando un gobierno decide apoyar a estas industrias, no sólo hay una compensación cultural, sino también económica”.     

Leer el estudio “Tiempos de cultura – El primer mapa mundial de las industrias culturales y creativas”  en worldcreative.org.